febrero 18, 2006

MADRUGADA DEL 18 DE FEBRERO

No podía ser de otra manera... nos acostamos con sentimiento de culpa porque nos habíamos comprometido a llevar parte de las meriendas del desayunáculo... y se nos olvidó; cuando lo recordé eran ya pasadas la 1 de la madrugada, confiamos en en buen Dios que ello no provocase reclamos destemplados y aceptamos desde ya las tallas que recibiríamos... para variar.

Amanece en Montahue, ya se va notando la cercanía del fin del verano en nuestra zona, cada vez está amaneciendo más tarde y se va hciendo evidente, más aún si como hoy el cielo está nublado.


Poco a poco vamos llegando, esta vez asistimos nueve, entre las sombras, sin visitas ni nuevos integrantes, pero con la mochila llena de sentimientos, sensaciones, anhelos, peticiones y ofrendas.

Ahí está: Ella, la gran Misionera, la que hará grandes milagros (palabras escritas de puño y letra por el Fundador en la imagen de la MTA), su luz, faro en las tinieblas nos guía hacia el encuentro con su hijo Jesús.


Será casualidad que este lado de los asistentes sea el que más "brilla" y no por exceso de luz...

o sea... un brillante recogimiento de Guillermo, Patricio, Dante y Domingo.
Pero aunque no "brillante" no menos recogida la concentración de estos hermanos, entre ellos...

Jorge (el bueno o ¿el viejo?), Juan y Daniel (te echábamos de menos).

No tuvimos la compañia de the music man ni de key man... por lo tanto, un par de canciones a capela y no pudimos hacer adoración al Santísimo, pero no por ello fue menos intensa la oración. Acompañamos a Guillermo en la difícil misión de asumir la partida de su mamá hacia el reino del Padre, pero como lo confortábamos días atrás, ella no ha muerto, sólo duerme y cada vez que visitamos a nuestra Madre del cielo en el Santuario, nuestra querida mamita está al lado de ella y si me apuran un poco, muchas veces, en esa delicadeza que es propia de María, su rostro se desdibuja para que aparezca la carita de mamá y ahí las vemos unidas, como ya lo están en nuestro corazón... perdón, me emociona sentirlo y vivirlo así. También tuvimos presente al P. Luis Ramírez: que su recuperación sea exitosa.

SORPRESA!!!!!!!
Nuestro buen San José, a quien creíamos de vacaciones, regresó esta madrugada y nos acompañó una vez más para hacernos sentir que, si bien no ha estado ultimamente con nosotros ello ha sido única y exclusivamente porque le tocó trabajar fuera... cierto Jorge (el olvidadizo)?
Y así concluye esta Madrugada, nueve gargantes -las más, desafinadas ( me incluyo)-
cantaron el Himno de Franz Reinich (nuestro himno) para testimoniar una vez más que apóstoles de Schoenstatt caballeros Madrugadores seremos.
Epílogo: Me acordé de cuál era mi aporte para el desayunáculo: los jugos de fruta!!! Para remediar el olvido, asumo el compromiso de los idem y además los sólidos (léase sanguchitos o sandwich -para los bilingües- o emparedados -para los finos-)
PLEASE: envíenme un correo con 48 horas de anticipación por si se me olvidan.
Un abrazo a todos los Madrugadores....
Nos vemos el 4 de Marzo.
Bendiciones a todos.

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