Con una alegría infinita compartimos la experiencia de la fundación de la primera comunidad de Madrugadores en las parroquias de Concepción, en este caso, la Comunidad de Base Padre Hurtado dependiente de la Parroquia Natividad de María, ubicada en el sector Collao; una imagen aérea del lugar, a propósito de las graves inundaciones del año 2006 permitirá apreciar el significado trascendental de esta fundación, particularmente si en esta nueva comunidad no hay schoenstattianos.
ORIGENES
Después de la Madrugada Internacional de Los Ángeles el anhelo de fundar nuevas comunidades se hizo más fuerte y como quedamos con el bichito tomamos contacto con un miembro de la comunidad, Pedro, a quien le contamos la idea quedando de acuerdo que me avisaría para que fuera a dar un testimonio. Así llegó el miércoles 12 de septiembre, fuimos invitados a la Misa que oficiaría en la Comunidad el P. José Luis Roldán, hombre muy mariano, quien se quedó después de la Misa para participar de la pequeña charla que daríamos. Lo cierto fue que al final de ella, uno de los asistentes dijo: y qué pasaría si partimos este sábado, refiriéndose al sábado 15 de septiembre, festividad de Nuestra Señora de los Dolores y pascua de nuestro padre y fundador. Avisamos rápidamente a la comunidad de Montahue, la víspera de tamaño feriado nos hacía temer que nadie nos acompañaría.
Luego empezaron las dificultades (en Schoenstatt, cuando se presentan dificultades es porque la iniciativa es querida por Dios, no en vano somos hijos de la guerra) las disculpas, comprensibles, no faltaron y me aprestaba a concurrir con unos pocos (de hecho hubo más de uno que no pudo llegar) y si eso no fuera suficiente, a la misma hora de la fundación debía ingresar a mi esposa a una clínica donde sería intervenida para reparar una fractura de muñeca (Moisés no pudo llegar a la tierra prometida, pero condujo hacia ella al pueblo de Israel).
FUNDACION
Al final llegaron tres miembros de la comunidad de Montahue: Roberto Bravo, el abad; Jorge Moraga, el bueno y vecino del sector, Juan Carlos Hernández, flamante y entusiasta soldado de Cristo. Pero dejemos que sea el propio Roberto quien nos cuente lo vivido:
“Por encargo de mis hermanos que hicieron los primeros contactos con estos varones, asistí junto a Jorge Moraga y Juan Carlos Hernández a la fundación de esta nueva comunidad. El día anterior, en mi caso, asistí en el colegio de mis hijos, a la ramada correspondiente, por lo que no pude acostarme muy temprano. No este pequeño inconveniente, el despertar del día siguiente, como ocurre casi siempre que hay madrugadas, no costó tanto, al contrario, tenía una sensación súper especial y que me mantenía muy vigoroso.
Para aquellos hermanos que no se ubican en Concepción, el barrio de Collao está en la periferia de la ciudad y corresponde a un barrio donde se ubican los regimientos de zona, el estadio municipal (donde ronca el león de Collao, a veces) y la universidad del Bío Bío, además de un número no menor de sectores residenciales.
Por una mala costumbre, que al parecer está entronada en nuestra patria, la dirección de la capilla donde se realizaría la madrugada, no estaba referida a una calle y número exacto y solo sabíamos que estaba en una determinada villa, pasadita una plaza, al final de una calle y en un lugar de una capilla en construcción. Clarito.
Como el Espíritu Santo rondaba esa mañana en Collao, providencialmente nos topamos con un futuro madrugador, que nos llevó al lugar del encuentro.
Nos encontramos con 12 aspirantes a madrugadores, muy entusiastas en un salón de su comunidad de base, ansiosos de saber como era esto de madrugar a las 7 de la mañana.
Brevemente nos presentamos, dispusimos de las bancas en forma de círculo y como a todos se nos olvidó el Hacia El Padre, inventamos una rutina madrugadora, iluminados por E.S. Nos acompañó musicalmente un madrugador con guitarra, lo que hizo que el momento fuera más pleno, ya que es una característica del Madrugador, disfrutar y vibrar los cantos. Hubo mucha oración comunitaria, en un ambiente de confianza inusual para personas que estábamos recién conociéndonos, lo que en mi opinión es atribuible a la presencia a borbotones del E.S.
La hora de madrugada pasó volando y quienes tuvimos la suerte de asistir a esta fundación, sospechamos que la semilla del madrugador, había caído en TIERRA FÉRTIL.
Luego vino el DESAYUNACULO donde fue posible compartir en una forma diferente y que nos permitió, utilizando para ello la tecnología actual, presentarles las imágenes de la presentación corporativa de los Madrugadores de Montahue y luego algunos videos de la experiencia del Encuentro Internacional de Los Ángeles.
Al finalizar la madrugada, surge espontánea la invitación a volver a madrugar el sábado siguiente, con lo que nos quedó claro que nuestro apadrinamiento sería una cuestión larga y que aceptábamos con mucha alegría y fe.
Finalmente, para destacar es señalar que en esta fundación habíamos doce varones y que esta ocurrió un 15 de septiembre. Ambas cuestiones, no menores para los cristianos y schoenstattianos.
La invitación a seguir apoyando a esta nueva comunidad está vigente, por lo que esperamos que cada uno de nosotros aporte su granito de arena (que van a necesitar harta para la construcción de la capilla)”.
NO HAY PRIMERA SIN SEGUNDA, MI ALMA
Ese día, de acuerdo a lo que nos comentaba Jorge Moraga y como lo indica Roberto, quedaron muy entusiasmados y decidieron repetirse el plato, de forma que convocaron a una segunda madrugada para el día sábado 22. Como el 15 era la celebración de la pascua del fundador, asistimos a Misa a Montahue para dar gracias a Dios por el éxito de la operación de mi esposa, a quien dejamos descansando en casa mientras subíamos al terruño santo de Montahue. La Misa la ofició el P. Humberto Anwandter a quien le comentamos de la fundación de ese día; el P. Humberto había aceptado días atrás incorporarse a nuestra comunidad de Madrugadores, de manera que quedó invitado a la madrugada del sábado 22 en Padre Hurtado.
La noche anterior convocamos además, a nuestro vecino Pedro Osorio, recién incorporado y coordinamos todo con el P. Humberto. Nos habían avisado que también asistiría el P. Juan Carlos Soto, diocesano y vicario de la Parroquia Natividad de María, de manera que la Misa sería concelebrada.
Un detalle, el P. Juan Carlos Soto forma parte de un grupo de sacerdotes diocesanos formado por el P. José Luis Correa, para incorporarse al Instituto de los Padres Diocesanos de Schoenstatt y de hecho sellará su Alianza con la Mater en diciembre próximo.
Y llegó la Madrugada, a las 6,30 junto a Pedro, nuestro vecino, pasamos a buscar al P. Humberto; a las 6:50 llegamos al lugar de reunión y enfilamos rumbo a la capilla en construcción situada en Calle 1 esquina de Pasaje 1, del sector Los Lirios.
Al lado de los cimientos de la construcción está ubicada la sala múltiple que hace por mientras las veces de templo y dimos inicio a esta segunda Madrugada con Misa Solemne, presidida por el P. Juan Carlos Soto y concelebrada por el P. Humberto Anwandter.
El P. Juan Carlos en su plática, hizo notar la trascendencia para la Iglesia de nuestra corriente de vida que permite a los varones integrarse activamente a la vida de la Iglesia, que tiene una marcada tendencia femenina.
En la ocasión nuestro hermano Jorge el bueno, a nombre de la comunidad de Montahue hizo entrega de una imagen de Nuestra Señora, Madre y Reina Tres Veces Admirable de Schoenstatt a la comunidad Padre Hurtado, comprometiéndose para enmarcarla como Ella se merece, en una oportunidad próxima.
La música de los Madrugadores sonó fuerte y triunfante, el coro de la ocasión formado por Cristian y Daniel, de la comunidad anfitriona y José María, galleta muy cercana a Montahue, hizo que nuestras desafinadas voces se armonizaran y no digamos que como un coro de ángeles, pero sí de varones locos por Jesús y María, pudiésemos entonarlas alabanzas al Dios uno y trino que, sin duda alguna, se regocijaba de esta muestra de amor filial.
Después del envío, Guillermo el elegante no se aguantó y pidió a los asistentes cantásemos el Himno de Maipú… quedó la escoba en la desafinación y con más corazón que armonía las paredes de la sala se llenaron de las voces de los asistentes que en más de 20 personas nos dimos cita extramuros para reafirmar la fundación de esta Comunidad Padre Hurtado, primera diocesana de Concepción.
El desayunáculo estuvo a la altura de las circunstancias, claro que Roberto Bravo y el Elegante se dieron maña de producción y con data show presentaron a los asistentes un clip elaborado por la comunidad de Montahue párale IX Encuentro –que por razones del programa no se presentó- así como cortos videos de esa madrugada. Al partir, misión cumplida.
COLOFON.
Nos regresábamos con el P. Humberto y Pedro, comentando lo vivido; enfilamos por calle Los Carrera hacia el puente Llacolén y al ingresar a éste aparece un arco iris completo, brillante y radiante que se mantuvo completo por todo el trayecto (2 klms) para difuminarse a nuestra salida del viaducto. Motivados por el P. Humberto dimos gracias a Dios por esta delicada expresión de su afecto y de su alianza con el pueblo escogido.
SALUDOS DE CONDOLENCIAS POR MI MAMÁ....
Hace 3 meses.
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